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Sam Presti del Thunder de Oklahoma City recibió el martes el nombramiento como el ejecutivo del año de la NBA, premio recibido tras convertir al equipo en una potencia que ganó 68 juegos, el mejor récord de la liga esta temporada.

Es la primera vez que Presti gana el premio y la primera vez desde 1994 —en ese entonces llamados SuperSonics de Seattle— que el principal ejecutivo de la franquicia se convierte en ganador. Bob Whitsitt lo ganó esa temporada.
Presti, vicepresidente ejecutivo y gerente general del Thunder, recibió diez votos de primer lugar de un panel de 30 ejecutivos, uno por cada equipo de la NBA. Presti apareció en 22 de las 30 boletas.

"Un premio como este es realmente el resultado de nuestros jugadores y su compromiso con nuestro programa", afirmó Presti. "Se esfuerzan en todas las capacidades por el bien del equipo. Tengo la suerte de trabajar con este grupo particular de hombres y no doy por sentado su profesionalismo.

"Tenemos un cuerpo técnico y un personal de apoyo increíbles, muchos de los cuales han estado aquí por más de diez años detrás del equipo, y veo su excelencia día a día, de maneras que son invisibles pero invaluables para una organización sostenible".

Koby Altman de Cleveland fue segundo con seis votos de primer lugar, después de que los Cavaliers ganaron 64 juegos y terminaron en la cima de la clasificación de la Conferencia Este. Trajan Langdon de Detroit también obtuvo seis votos de primer lugar y fue tercero, después de que los Pistons pasaron de ser un equipo de 14 victorias a un equipo de playoffs con 44 victorias en su primer año liderando esa oficina.